Estoy en mi cama...

Ya se...
Casi no he escrito; entre que no tengo teléfono en casa, que ni he estado en la oficina porque nos traen para arriba y para abajo, los ensayos de "pareja abierta" (estrenamos martes 30 ene. 8:00 p.m. auditorio centro cultural de esta ciudad/pueblo) y este bendito frío, todo se acumula y no tengo oportunidad de entrar a este su blog, y además, se hace más acusada esta patente soledad...
Les dejo este texto, breve.


Estoy en mi cama. Es grande. Está fría. La luz huyó de la habitación y aunque se lo pida con desesperación no vuelve. Hay sonidos. Hay ecos. Son sombras. Quién duerme. Quién calla. Quién logra soñar. Quién pudiera de la noche escapar sumiéndose en la bendición de la absurda y tranquila inconsciencia. Que no canten. Que no hablen. Que no hagan ruido. Que no pregunten. Que tengan piedad de los que son esclavos de los recuerdos que arañan la cordura. Dónde está el cansancio. Dónde está el olvido. Que venga. Le llamo. Le invito. Quién pudiera. Quién puede.

Lorena Illoldi